sábado, julio 15, 2006

CUERDA DE SALVACIÓN
EN CARTAGENA

En una conmovedora puesta en escena y acto simbólico, un grupo de 12 extranjeros provenientes de diferentes países de Europa, Norteamérica y África se congregaron en la Plaza de la Aduana de Cartagena de Indias para pedir perdón. De forma única, un grupo de personas pertenecientes a la organización “Juventud con una Misión”, llegaron a Cartagena de Indias —principal puerto negrero de América del Sur—, con el propósito de pedir perdón por todos los atropellos y actos inhumanos cometidos durante la trata esclavista en América.
Sanando el pasado y transformado el futuro, es el emblema que este grupo viene esgrimiendo acompañado con un conjunto de actividades que se vienen realizándose en diferentes ciudades de Europa y Estados Unidos; ahora el turno es para los puertos de desembarco de los esclavos en el Caribe y Sudamérica como son Barbados y Cartagena de Indias, durante el próximo año llegará a los puertos de embarque en el continente Africano. Edwin Salcedo, presidente de la RedAfro y promotor del proyecto Cuerda de Salvación en la ciudad de Cartagena de Indias dijo: “Sabemos que para ir hacia un futuro más claro y próspero, debemos sanar y afrontar el pasado sin resentimientos o culpas.
Sabemos que este acto simbólico es el inicio de una transformación de nuestra sociedad en una colectividad más armoniosa y tolerante, sin embargo hay que establecer acciones claras de reparación directa hacia esas comunidades que durante tantos siglos fue mantenida en condiciones de desventaja y sin poder ejercer sus derechos ciudadanos de forma igualitaria.”
De otra parte, se pudo notar como la ciudadanía espontáneamente se unió a la marcha, haciendo de forma implícita el otorgamiento de ese perdón como si estuviese esperándolo desde hace siglos. Conmovedoras fueron las palabras de Joseph Zintzeme, un camerunés de expresiones contundentes y sentidas quien en representación del pueblo africano, también pidió perdón: “Los extrañamos hermanos afrocolombianos, ustedes son parte de nosotros y nosotros parte de ustedes, quiero pedirles perdón por todos aquellos africanos que ayudaron y traicionaron a los hijos de África para ser vendidos como esclavos en las Américas, nosotros los extrañamos, nosotros los amamos... nosotros los amamos” Ahora queda por hacer una agendas de trabajo, encaminadas a diseñar estrategias de reparación como forma de hacer justicia frente a todos esos descendientes de africanos que hasta hoy siguen sufriendo las consecuencias del holocausto masivo más grande de la historia.